¿QUE IMPLICACIONES TIENE GENERALIZAR LAS ESTRATEGIAS DE ESTIMULACIÓN Y COMO TRABAJAN DESDE SUS DIMENSIONES?
Cada niño es diferente, por esta razón no es conveniente generalizar las estrategias de estimulación ya que todos poseen diferentes cualidades, comportamientos y culturas.
¿COMO SE EDUCA Y COMO SE APRENDE MEDIANTE LA ESTIMULACIÓN?
Durante esta etapa se perfecciona la actividad de todos los órganos de los sentidos, en especial, los relacionados con la percepción visual y auditiva del niño, esto le permitirá reconocer y diferenciar colores, formas y sonidos. Por otro lado, lo procesos psíquicos y las actividades que se forman en el niño durante esta etapa constituyen habilidades que resultarán imprescindibles en su vida posterior.
La etapa de 0-3 años de vida del niño establece particularidades en el desarrollo:
Se caracteriza por su ritmo acelerado del desarrollo del organismo.
Interrelación entre el estado de salud, el desarrollo físico y psiconervioso del niño.
Alto grado de orientación con el medio.
Desarrollo de estados emocionales.
Papel rector del adulto en el proceso del desarrollo.
La estimulación temprana busca estimular al niño de manera oportuna, el objetivo no es desarrollar niños precoces, ni adelantarlos en su desarrollo natural, sino ofrecerle una gama de experiencias que le permitirán formar las bases para la adquisición de futuros aprendizajes.
Áreas de la estimulación temprana:
-Cognitiva: le permitirá al niño comprender, relacionar adaptarse a nuevas situaciones, haciendo uso del pensamiento y la interacción directa con los objetos y el mundo que los rodea. Para desarrollar esta área el niño necesita de experiencias así podrá el niño desarrollar sus niveles de pensamiento, capacidad de razonar y reaccionar de forma rápida ante diferentes situaciones.
-Motriz: esta área está relacionada con la habilidad para moverse y desplazarse, permitiendo al niño tomar contacto con el mundo, comprende la coordinación entre lo que se ve y lo que se toca. Para desarrollar esta área es necesario dejar al niño tocar, manipular e incluso llevarse a la boca lo que ve, permitir que explore pero sin dejar de establecer límites frente a posibles riesgos.
-Lenguaje: está referida a las habilidades que le permitirá al niño comunicarse con su entorno y abarca tres aspectos: la capacidad comprensiva expresiva y gestual. La capacidad comprensiva se desarrolla desde el nacimiento ya que el niño podrá entender ciertas palabras mucho antes de que pueda pronunciar un vocablo con sentido; es importante hablarle constantemente, de manera articulada relacionándolo con cada actividad que realice o para designar un objeto que manipule, de esta manera el niño reconocerá los sonidos o palabras que escuche asociándolos y dándoles un significado para luego imitarlos.
-Socio-emocional: esta área incluye las experiencias afectivas y la socialización del niño, que le permitirá querido y seguro, capaz de relacionarse con otros de acuerdo a normas comunes. Para el desarrollo adecuado es primordial la participación de los padres como primeros generadores de vínculos afectivos, es importante brindarles seguridad, cuidado, atención y amor. Los valores de la familia, el afecto y las reglas de la sociedad le permitirá al niño poco a poco dominar su propia conducta.
El mundo que nos rodea está cargado de actos y situaciones poco éticas, desagradables e incorrectas, y los niños lo absorben todo, por eso, es de gran importancia el papel de los padres en la correcta educación. Todos los valores deben surgir del seno familiar. Los niños no nacen con virtudes peyorativas sino que somos, primero los padres y luego el entorno, quienes se los mostramos. Tenemos pues el poder de cambiar el destino formando individuos con valores sanos. Para conseguirlo hay que practicar cinco normas básicas:
- Ser padres ejemplares: debemos mirar en nuestro interior, ver si somos, si nos comportamos como queremos que sean y se comporten nuestros hijos.
- Comunicación: debemos abrirnos a los hijos, hablar de nuestros sentimientos y pensamientos para que ellos se abran a nosotros.
- Reducir los impactos nocivos: la televisión, los videojuegos, Internet… y en general todo su entorno está cargado de impactos negativos que influirán en su conducta. Asegúrate de que lo que ve y de que las personas con las que se rodea sean las más idóneas.
- Saber corregir: hay que frenar las conductas negativas, explicar las consecuencias de su actitud (siempre con un lenguaje adaptado a la edad y madurez del niño) y mostrar conductas correctas.
- Enseñar: dialogar mucho con ellos, razonando y explicándoles, no supongas que los niños saben las cosas, debes enseñárselas y la mejor manera es con ejemplos prácticos, con situaciones del día a día, con libros, cuentos, etc.
Que aprenden los niños a cada edad:
Conseguir que los hijos entiendan lo que es bueno y correcto y sepan diferenciarlo de lo que es malo e incorrecto, dependerá de la madurez, del grado de entendimiento y de la comprensión del niño. Para enseñar valores hay que tener en cuenta su edad y desarrollo (emocional, mental y social). No podemos exigir la misma responsabilidad a un niño de 3 años que a uno de 5.
Niños de 0 a 1 año: los bebes desde que nacen necesitan, aparte de que se les cubra sus necesidades básicas de aseo y alimento, recibir el máximo amor y cariño por parte de sus padres. Es la manera de poder construir los cimientos sobre los que se levantará su seguridad, independencia y desarrollo. Los bebés no entienden de normas pero si de ternura.
De 1 a 3 años: Todavía no dominan el lenguaje pero son capaces de entender algunas normas sencillas. Es la edad en la que necesitan los límites como pauta de su comportamiento, por ejemplo “no tires tierra”, “eso no se toca”, “no se muerde”. Así aprenderán a reconocer lo que está bien y lo que no.